¡Aguas! El diablo quiere quitarte de tu iglesia

15 Minutos y 10 Personajes. De nuevo el diablo y sus ayudantes quiere que Carlos deje la iglesia. Por todos los medios tratarán de conseguir ese medio.

¡AGUAS! EL DIABLO QUIERE QUITARTE DE TU IGLESIA

Tema: Cómo el diablo pone división entre los Cristianos.

PERSONAJES

NARRADOR
CHAMUQUILLO
CHAMUMALITO
MALVADO
CARLOS
DANIEL
MARTA
LÍDER
BRENDA
MESERA


ESCENA I: LOS DEMONIOS EN LA CALLE

NARRADOR. Carlos aceptó a Cristo hace seis meses. Chamuquillo y Chamumalito son los demonios asignados por su jefe Malvado para tratar de alejarlo del Señor. Están platicando entre ellos.

CHAMUQUILLO. ¿Qué haremos? Carlos ya cortó con Claudia porque quiere estudiar la Biblia con Daniel y Fabiola. Está aprendiendo mucho y está orando con más y más fe.

CHAMUMALITO. Si ora tanto, en poco tiempo se convertirán sus padres y sus amigos también.

MALVADO. ¡Tontos, insensatos, perezosos, inútiles! Ustedes no sirven para nada. La manera más fácil de tumbar a Carlos es causar problemas en su Iglesia hasta que él salga enojado y sentido de ahí. Les mandaré otros demonios para ayudar en esto.

CHAMUQUILLO. ¿Qué hacemos?

MALVADO. Hay que plantar semillas de discordia especialmente entre Daniel y Carlos. Poner pensamientos en Carlos como, "Daniel no tiene tiempo para mí. Siempre está con su novia", "¿Cómo es posible que Daniel haga esto siendo un cristiano maduro?", “Daniel prefiere sus otros amigos y se está olvidando de mí", "El pastor no me saludó", "El director de alabanza trató mal a mi amigo y por eso yo no me puedo concentrar en alabar a Dios"…

CHAMUMALITO. Y después que se aparte de la Iglesia, cuando esté solito, podemos destruir su fe y hacerlo sentir completamente miserable.

CHAMUQUILLO. ¡Completamente miserable! ¡Al ataque!

MALVADO. ¡Un momento! No olviden que la meta es que reaccionen antes de orar o pensar en un versículo de la Biblia, queremos personas actuando con sus emociones fuera de control.

CHAMUQUILLO. ¡Pues, al ataque!


ESCENA II: REUNIÓN DE JÓVENES

(Mientras habla el líder los demonios quedan entre los jóvenes.)

NARRADOR. El líder de jóvenes está hablando en la reunión mientras los demonios están poniendo mentiras en la mente de Carlos.

LÍDER. Antes de empezar la reunión, siento que debo platicarles de algunas cosas. Primeramente, ustedes llegan a las reuniones cada vez más tarde. Empezamos a las siete, no a las siete cuarenta y cinco.

CHAMUQUILLO. Carlos, él se está enojando contigo porque llegaste tarde una sola vez, eso no es justo.

LÍDER. También si vamos a funcionar bien, ustedes deben cumplir con su palabra. Si es que vas a traer el refrigerio, hay que hacerlo, y si por alguna emergencia no puedes traerlo, llámame para decirme que no será posible. Si prometes ensayar a las cinco, no llegues a las seis y media. Si dicen que van ayudarme en traer despensa a los pobres, hay que cumplir.

CHAMUMALITO. Carlos, todo este rollo es porque no fuiste con los jóvenes para ayudar a los pobres. Aunque les explicaste la semana siguiente que vinieron tus primos inesperadamente y te olvidaste completamente de ese compromiso, él todavía trae esto contra ti. Él está regañándote a ti sólo porque olvidaste un pequeño detalle. ¡Qué injusto!

LÍDER. Por último, cuando tenemos eventos especiales, quiero que inviten a gente. Tuvimos una fiesta evangelística y no había nadie nuevo.

CHAMUQUILLO. ¿Ves? Está enojado contigo. Ni intentaste invitar a nadie. Eres un mal cristiano, no debes regresar aquí más; ya recibes bastantes regañadas en tu casa como para recibir otra más aquí en la reunión de jóvenes. Además te estás perdiendo programas muy suaves en la tele.

NARRADOR. Después de la reunión, había refrigerio y tiempo de charla. Carlos se encuentra solo.

CHAMUQUILLO. Quédate aquí solito, mira tu reloj y cuenta los minutos antes de que alguien se te acerque para hablar. Ellos no te quieren a ti. Será mejor que nunca regreses.

(Daniel y Fabiola se acercan a Carlos.)

DANIEL. Carlos, ¿qué onda? ¿Cómo estás?

CARLOS. Más o menos.

DANIEL. Te llamaré por teléfono mañana. Tengo que regresar a Fabiola a su casa antes de las 10:30 p.m. o ¡tenderemos la tercera guerra mundial! Antes de que se me olvide, el martes no habrá estudio bíblico porque cumple años la hermana de Fabiola.

CHAMUMALITO. ¿Ves Carlos? Daniel está poniendo pretextos para no pasar tiempo contigo. Ya te traicionó. Es mejor que nunca vuelvas a esta Iglesia.

CHAMUQUILLO. ¡Mira! Julieta ni te saludo, cree que es demasiado buena para ser tu amiga. Así son los Cristianos. ¿Para qué te juntas con ellos?

MARTA. Carlos, ¿Cómo estás? ¿Podrías ayudarme con un gran problema que tengo? ¡Invité a mi prima y ella está aquí por primera vez! Pero no tiene transporte para regresar a su casa. Vino en camión pero es peligroso que se regrese así. ¿No puedes llevarla a su casa?

CHAMUQUILLO. Ellos solamente quieren aprovecharse de tu generosidad. Dile que no.

CARLOS. Pues... tengo que irme directamente a mi casa ahorita mismo. Pero en otra ocasión será un placer.

MARTA. Disculpa la molestia ojalá que haya otra oportunidad.

CHAMUQUILLO. Ya, Marta está enojada contigo. Nadie te aprecia, nadie te quiere, mejor ya no regreses aquí.

CHAMUMALITO. Carlos, acércate para que puedas oír la conversación.

BRENDA. ... Clara dice que la Señora Largalengua dice que la esposa del Director de Alabanza dice que el Pastor está molesto con Carlos.

ROSY. ¿Por qué? ¿Qué hizo?

BRENDA. No sé exactamente, pero debe ser horrible porque el Pastor siempre es muy paciente y ahora parece que está muy enojado; pero voy a investigar bien. Estoy muriéndome por saber qué pasó. Dijo Clara que el Director de Alabanza se enojó también. Esto va a estar muy interesante.

CHAMUQUILLO. Están platicando de ti, Carlos. El pastor va a echarte fuera de la iglesia. Es completamente injusto, pero todos están en tu contra. Ni debes ser cristiano.


ESCENA III: CUARTO DE CARLOS

NARRADOR. Carlos ya decidió nunca regresar a la Iglesia. Daniel le llama por teléfono.

CARLOS. ¿Bueno?

DANIEL. Carlos, ¿cómo estás? Te vi triste el sábado en la noche y ayer no fuiste a la Iglesia. ¿Pasó algo malo?

CARLOS. No pasa nada. Sólo que he decidido no regresar a la Iglesia

DANIEL. Pero, ¿por qué? ¿Qué pasó? Después de seis meses de asistir, no harás una decisión así sin una buena razón. Dime, ¿qué es lo que pasa?

CARLOS. Pues nada, solamente es mi decisión.

DANIEL. Y a los estudios con Fabiola y conmigo, ¿seguirás asistiendo?

CARLOS. Tampoco. Ya no quiero nada con los Cristianos.

DANIEL. Te invito una hamburguesa a las siete. Pasaré por ti. Adiós.


ESCENA IV: REUNIÓN DE LOS DEMONIOS

NARRADOR. Ya viene Malvado para recibir reportes del trabajo de Chamuquillo y Chamumalito

MALVADO. ¿Cómo les fue?

CHAMUQUILLO. ¡Fabuloso! Carlos ya no va a la iglesia. Casi no lee la Biblia y está demasiado desanimado para orar.

CHAMUMALITO. ¡Todo salió de maravilla! Chamuquillo hizo muy buen trabajo con las chismosas.


ESCENA V: RESTAURANTE

MESERA. ¿Qué quieren ordenar?

DANIEL. Dos hamburguesas y dos coca colas. Después queremos postre.

MESERA. Lo siento, pero hoy no trajeron hielo. El único refresco que tenemos frio es Fanta.

CARLOS. Está bien. Tomamos Fanta.

DANIEL. Carlos, tú debes saber que la gran estrategia de Satanás es apartarte a ti y a todos los Cristianos de la Iglesia, porque cualquier persona que está sola, puede ser atacada ferozmente. He visto esto pasar a personas buenas y no quiero que te pase a ti. Por favor, dime qué pasó. Primero, ¿Hice algo yo que te ofendiera?

CARLOS. Pues, cuando no tuviste tiempo de hablarme en la reunión de jóvenes y cancelaste el estudio, pensé que tal vez no tendrías más tiempo para mí.

DANIEL. Lo siento. Es que el papá de Fabiola no es creyente. Se pondría muy enojado si llegábamos tarde cinco minutos. Y pensé que si llegábamos un minuto tarde, no podríamos salir por seis meses. No asistir a la piñata de Sara sería pecado mortal. Pero estas cosas no tienen que afectarte a ti. ¿No puedes venir el jueves para estudiar la Biblia con nosotros?

CARLOS. Está bien, si voy.

DANIEL. ¿Te sentiste mal cuando el Líder de Jóvenes nos llamó la atención por alguna cosa?

CARLOS. Yo siento que es injusto que se enoje conmigo por llegar tarde una sola vez en seis meses.

DANIEL. No estaba enojado. Pero Pablo y los que van con él han llegado tres semanas seguidas sólo para el refrigerio, Karla prometió cantar dos solos y ¡ni vino a la reunión! No llegó nadie para ayudar el día planeado para repartir despensas para los pobres, aunque 12 personas se habían apuntado como voluntarios. El Líder de Jóvenes nos respeta y nos trata como amigos y como personas responsables. A mí me parece bueno esto.

CARLOS. ¡Yo pensaba que estaba todo dirigido a mí!

DANIEL. ¿Sabes por qué? Es porque el demonio siempre quiere hacernos creer que los demás Cristianos están en contra de nosotros y pone esos pensamientos en nuestra cabeza. Hay que resistirlo. Mira lo que dice la Biblia: "Con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, solícitos en guardar la unidad del espíritu en el vínculo de la paz" Efesios 4:2,3

CARLOS. Pero el Pastor va a echarme fuera de la congregación y yo no he hecho nada, mejor no regreso.

DANIEL. ¿De dónde viene esa idea tan ridícula? El Pastor me preguntó por ti y estaba muy preocupado por ti.

CARLOS. Yo escuché a Brenda cuando dijo que el Pastor estaba muy molesto conmigo y debe ser algo muy serio porque el Director de Alabanza también se enojó.

DANIEL. Brenda tiene un problema tremendo con el chisme. Ella platica antes de oír toda la historia. Ella supone que el tal Carlos era de nuestra congregación y lo platicó a medio mundo. Tres hombres con el nombre de Carlos ya han hablado con el Pastor para aclarar las cosas, porque pensaron que habían hecho algo malo. Lo que realmente sucedió fue esto: Un hombre llamado Carlos David Loya López que nunca ha pertenecido a nuestra Iglesia decidió difamar a nuestro Pastor en el periódico. Le acusó de muchas cosas, incluyendo que era narcotraficante y que usaba a la congregación para cubrir sus actividades criminales.

CARLOS. ¡Válgame! Ya entiendo cuando dices que el diablo tiene una estrategia para apartarnos de la iglesia. Dejando de congregarme me sentí completamente frío. Aún peor, fui a la disco una noche y después me sentí todavía peor. Pero ya voy a congregarme, no importa qué pase, ¡Y voy a estar alerta contra los trucos del diablo!
Nota: Esta obra pertenece a un serie mayor que se encuentra también en el blog.
LAS DECISIONES Y SUS CONSECUENCIAS

No hay comentarios:

Publicar un comentario